Día nacional del café en Colombia, una oportunidad para recorrer las Rutas del Paisaje Cultural Cafetero.
Por: César Augusto Ángel Valencia.
Visitar el Paisaje Cultural Cafetero, es compartir y entender a través de diversas experiencias de viaje, la realidad de las actividades productivas del campo en el centro occidente de Colombia, sobre los andes, donde productores del grano han adaptado sus fincas para recibir visitantes de diferentes lugares del mundo, obteniendo ingresos adicionales muy importantes para la región, gracias a la oferta de servicios a turistas que, al viajar hacia zonas rurales, se encuentran con actividades productivas como la caficultura, la ganadería, producción de frutas, cacao, hortalizas, plantas aromáticas, medicinales, viveros, donde crecen las plantas y flores que decoran las fincas y los balcones de las casas en los pueblos con encanto de Risaralda, Caldas, Quindío y Valle del Cauca.
Este destino plantea una nueva forma de aprovechamiento para aquellos suelos productivos que durante más de un siglo han sido protagonistas en la producción cafetera, sumando un sano uso recreativo de la tierra, al implementar experiencias como los tours cafeteros, de la semilla a la taza. Son estas, nuevas opciones de viaje, las que motivan el desplazamiento de turistas tanto de Colombia como del mundo entero. Unos buenos ejemplos, son la Finca El Ocaso en Salento, La Morelia en Armenia, Café San Alberto en Buenavista, La Divisa de Don Juan y Café Granate en Pereira, Café Don Manolo y la Ruta de la Serranía del Nudo en Dosquebradas, La Finca del Café en Santa Rosa de Cabal, Brisas del Cauca y su tour de chocolate y frutas en Marsella, Hacienda Venecia en Manizales y muchas otras, donde los propietarios y sus equipos de trabajo, apasionados por la cultura del café, crean experiencias diferenciadas y únicas, que exaltan este territorio, el cual ha sido incluido en la lista mundial de patrimonio de la Unesco (WHL), convirtiéndose en los educadores vivos de un sitio de patrimonio que es vivo, dinámico y no es estático. Por medio de guías locales, senderos bien equipados y actividades de inmersión, posibilitan que cada finca plantee una alternativa diferenciada para sus turistas. Son este tipo de experiencias una novedosa forma de acercar a quienes viven en las ciudades, con el campo y la naturaleza. Estos sitios, no reemplazan la realidad del campo y la vida campesina, pero su operación y facilidades para el turista sí hacen una significativa contribución a la oferta turística regional, a la construcción del consumo de café suave colombiano de alta calidad y a la revalorización del patrimonio a través del turismo.
Una de las rutas que se puede recorrer en el Paisaje Cultural Cafetero se denomina “viaja al origen del mejor café suave del mundo”, la cual hoy recibe un creciente grupo de viajeros que están llegando a la región cafetera de Colombia.
En el caso de Pereira, la ciudad se ha posicionado como la que cuenta con el mayor número de conexiones aéreas a nivel internacional, con 14 frecuencias semanales y 1418 sillas disponibles, conectando con destinos internacionales como Panamá, Miami y Bogotá a través de vuelos directos, lo que hace que la región cafetera se encuentre a dos vuelos de casi cualquier lugar del mundo. El aumento del gasto en el turismo mundial crece cada año y sin lugar a dudas, quien viaja fuera de su lugar de origen gasta más libremente que cuando está en su casa y demanda experiencias únicas y significativas, las cuales se correlacionan con dos factores que distinguen las experiencias que se ofrecen en las Rutas del Paisaje Cultural Cafetero, los cuales son el mercado y el producto. El mercado, son los turistas que visitan los espacios rurales, así sea por una breve salida de medio día, o una estancia prolongada. Lo que usualmente buscan son espacios de entretenimiento. Por ello, el agroturismo en el Paisaje Cultural Cafetero no solo debe ser el vender un producto asociado al campo, como los alojamientos rurales, sino también ofrecer experiencias que posibiliten recorrer el territorio, para descubrirlo de manera directa.
Tanto el producto turístico, como la experiencia, deben estar asociados a un plan de viaje o paquete. Es común, que, en el sector del turismo, se olvide que el turista compra y paga el paquete una sola vez, aunque en la producción del mismo, intervengan diferentes actores que cobran por servicios turísticos o actividades experienciales. Muchos negocios pequeños en el Paisaje Cultural Cafetero han comenzado a depender de los ingresos del turismo y por ello, los empresarios que usan la marca Rutas del Paisaje Cultural Cafetero se han preparado en calidad del servicio, hospitalidad y sostenibilidad turística, pues son fundamentales para la creación de las experiencias de viaje que han logrado que miles de turistas colombianos y extranjeros regresen felices a sus lugares de origen.
El agroturismo, en la mayoría de los casos, complementa otras actividades productivas de las fincas, como la producción de café, plátano, cítricos o ganado, siendo un renglón cada vez más importante en la economía rural.
La combinación entre productos agrícolas, como el café, y experiencias de viaje en las fincas han encontrado beneficios importantes en el creciente mercado turístico que se distribuye por los municipios cafeteros, lo cual ha generado en los empresarios locales, la necesidad de involucrarse en los procesos de planificación y promoción del turismo, aunado a la capacidad de la gente de esta región, de asociarse con otros para salir en busca de mercados cada vez más distantes.
Los empresarios que representan las Rutas del Paisaje cultural Cafetero, han entendido que el desarrollo sostenible es una de las tendencias más importantes en la industria de viajes. En esta tierra, es posible encontrar diversos ejemplos de personas que desarrollan su actividad turística sin destruir la calidad del sitio, por el contrario, aportando a la revalorización de la cultura y naturaleza de la región, promoviendo una variedad de destinos de calidad, los cuales son presentados con orgullo al mercado, cada que se visita una feria o vitrina turística, dentro o fuera del país, creando siempre nuevas respuestas a las expectativas del viajero, nuevas cosas para hacer y ver, cuando se recorren las Rutas del Paisaje Cultural Cafetero.
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